LAS ALMOHADAS Y EL VERANO: CONSEJOS PARA ELEGIR LA ALMOHADA ADECUADA Y QUE NO NOS DUELA EL CUELLO

LAS ALMOHADAS Y EL VERANO: CONSEJOS PARA ELEGIR LA ALMOHADA ADECUADA Y QUE NO NOS DUELA EL CUELLO

¡Qué ganas teníamos de que llegara el verano y poder viajar un poco y cambiar de aires! Aunque hay que tener precaución aún ya que, por desgracia, la pandemia de la Covid-19 ni mucho menos ha finalizado. Casi todas las personas necesitamos un “cambio de aires” después de un año más estresante de lo habitual.

Nos vamos unos días por ahí, y durante la estancia o a la vuelta… ¡Zas! Dolor cervical porque la almohada del sitio donde he dormido nos resultaba súper incómoda.

¿Cómo podríamos evitar esto? Hay dos formas:

  1. VIAJO CON MI ALMOHADA: ya sé que a priori se nos ocurren mil impedimentos para esto. Que si ocupa mucho sitio, que si voy en avión o en tren … Es cierto que llevar nuestra almohada de casa no es lo más sencillo. Pero si vamos a viajar en coche sí que podemos tener lista una almohada del mismo modelo que la que usamos en casa, pero más pequeñita, de un ancho menor. Así sabemos que vamos a estar cómodos y no nos ocupa tanto espacio.
  2. NO PUEDO VIAJAR DE NINGUNA MANERA CON MI ALMOHADA: CONSEJOS PARA SABER CUÁL ES LA ALMOHADA ADECUADA PARA MÍ.

Las almohadas, al igual que el calzado y la ropa, tienen que ser adecuados a las características físicas de cada persona. Todos entendemos rápidamente que mi número de pie y la anchura del mismo no es igual que el de otra persona. Pues con las almohadas sucede lo mismo. No tengo yo la misma anchura de espalda, ni la misma corpulencia, ni las mismas curvas en la columna que otra persona. Por tanto, si en el establecimiento donde vayamos a dormir tienen diferentes tipos de almohada, estos son unos CONSEJOS PARA ELEGIR LA ALMOHADA QUE ES ADECUADA PARA LA FORMA DE TU CUERPO.

En general, podemos decir que la almohada adecuada debe reunir estos requisitos:

  1. Debe ser de un GROSOR que MANTENGA LA COLUMNA ALINEADA, tanto si duermes boca arriba como de lado. Ni más ni tampoco menos.
  2. Debe tener además un MATERIAL QUE SE ADAPTE A LA FORMA DE TU CUELLO; pero ni demasiado adaptable y que se deforme, ni demasiado duro.
  3. Debe tener un GRADO DE FIRMEZA que te produzca una sensación de confort al apoyo.

Estos consejos, en realidad sirven para cualquier época del año, si bien ahora en verano hay más frecuencia de uso de almohadas diferentes a la habitual.

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