¿TU BEBÉ TE HACE DAÑO SOLO EN UN PECHO? ¿PREFIERE UN PECHO AL OTRO? ¿SÓLO SE ENGANCHA BIEN EN UNO? ¿HAY DOLOR, GRIETAS, MASTITIS… SIEMPRE EN EL MISMO PECHO? PODEMOS AYUDARTE.

¿TU BEBÉ TE HACE DAÑO SOLO EN UN PECHO? ¿PREFIERE UN PECHO AL OTRO? ¿SÓLO SE ENGANCHA BIEN EN UNO? ¿HAY DOLOR, GRIETAS, MASTITIS… SIEMPRE EN EL MISMO PECHO? PODEMOS AYUDARTE.

Cuando suceden algunas de estas cosas, “podemos caer en la tentación” de pensar que mi bebé prefiere un pecho al otro, que se ha acostumbrado a mamar de uno, que tiene una manía…

Nada de eso es cierto. Los bebés no pueden tener manías. Todas estas anomalías en la lactancia materna son simplemente la punta del iceberg. Signos y síntomas que indican que el trabajo de succión que hace el bebé es asimétrico. E insisto, esto no lo hace así “porque quiere”, sino que al no poder realizar el trabajo de la forma normal por algún motivo, hace lo que puede para alimentarse. Todos estos patrones asimétricos le suponen al bebé mayor cansancio, tomas más frecuentes, más gases… y a la madre molestias, agotamiento, dudas, etc. y, por desgracia, hay veces que esto acaba en un abandono de la lactancia materna.

¿Y QUÉ PUEDE PROVOCAR ESTO?

Son muchos los factores. Y aunque seguramente lo primero que se nos viene a la cabeza es que puede haber un frenillo lingual limitante, esto generalmente no es así en muchos de estos casos (o no es la causa principal). Si esto fuera así el bebé tendría problemas para poder succionar normalmente en ambos pechos y no sólo en uno de ellos.

¿Y entonces? Pues todo aquello que ocasione que el trabajo craneal, mandibular y lingual sea asimétrico puede estar ocasionando estos problemas. Por ejemplo:

  • El bebé no puede girar bien el cuello hacia un lado, o incluso tiene una tortícolis.
  • El parto ha sido instrumentalizado (se han usado fórceps, ventosa…).
  • El parto ha sido por cesárea.
  • El bebé ha estado “mucho tiempo encajado” durante el embarazo.
  • Presentaciones de nalgas, de cara, con manos o brazos interpuestos…
  • Tensiones entre el cráneo y las cervicales (de ahí surgen varios nervios y dos de ellos controlan parte de la musculatura cervical y casi toda la de la lengua).
  • Plagiocefalia (cráneo asimétrico y aplanado).

Estos son algunos de los factores que pueden dar lugar a todas estas molestias. La buena noticia es que la mayoría de ellas son trabajables con Fisioterapia y con los consejos de tu matrona y de tu asesora de lactancia y suelen evolucionar bien, ya que se tratan generalmente de mala función a nivel cervical, cráneo-mandibular y lingual y no de patologías.

Y ya sabes que en el Centro de Fisioterapia Manuel Raigón – Fisiopoyet somos especialistas en el tratamiento de bebés con técnicas seguras, indoloras y resolutivas, como el Método Poyet.

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